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terça-feira, 6 de outubro de 2020

LA JUSTÍCIA

LA JUSTICIA
Mario Lopez

Cuando uno se decide a comenzar la subida de la escalera masónica hacia el grado 33 del R.·. E.·. A.·. A.·.  espera, como el nombre indica, tratar temas filosóficos. Si bien todos los grados poseen un esoterismo propio, no es menos cierto que los temas materiales también deben ser tratados pues, en nuestro ascenso, se trata de autoperfeccionarnos en todos los sentidos.

Son varios los conceptos, digamos materiales, que se tratan y todos, o casi todos, relacionados con el buen comportamiento, la justicia y el libre albedrio.

Al tratar el tema de la Justicia me he dado cuenta que la que denominamos Justicia Humana dista mucho de ser Justa, lo cual no es de extrañar ya que somos humanos y, como tales falibles. Tan solo una justicia es justa, la Justicia Divina, pues el GADU en su onmipotencia todo lo conoce y todo lo puede ver y para aplicar la justicia con verdadera equidad es necesario conocerlo todo.

El motivo por el cual la Justicia Humana no siempre es justa se debe a lo que se ha dado en denominar Libre Albedrio. El libre albedrio puede asociarse a la dualidad  pues nos permite y obliga a elegir entre dos cosas; en el caso que nos ocupa entre lo justo y lo injusto. No debemos olvidarnos que el dos, la dualidad es vital en el ser humano puesto que solo por medio de la comparación el ser humano comprende y esa compresión, por supuesto, puede ser correcta o no. Y no entraré aquí en el tema de hacer algo injusto a sabiendas, pues eso haría este balaustre demasiado largo.

Llegados al punto de que el hombre ha de elegir entre lo justo y lo injusto, supongamos que elegimos siempre lo justo; pero he aquí que otra pregunta surge al momento: ¿el dualismo Justo-Legal es cierto?

Desgraciadamente la respuesta es que no siempre. Todos conocemos ejemplos de sentencias que no son justas, pero si son legales desde el punto de la leyes aprobadas. Por usar un ejemplo actual, es legal que un banco se queda con la casa si no se paga la hipoteca y encima el hipotecado siga con la deuda; pero todos en nuestro interior sentimos que no es justo, la casa cubre la deuda de sobra, debería ser suficiente.

Por lo tanto, en virtud a todo lo expuesto. Si lo correcto es ser justo y para ello debemos hacer uso de nuestro Libre Albedrio para elegir entre diferentes opciones posible será necesario poseer la Sabiduría necesaria para hacerlo; sin embargo, ser sabio va mucho más allá que poseer Conocimiento puesto que uno no implica el otro aunque yo afirmo que la Sabiduria si implica Conocimiento.

Así pues, la Justicia Humana se basa en el Libre Albedrio y para ser aplicada correctamente necesita de una sabiduría que solo se puede alcanzar a través del Conocimiento.

Logrado ese punto la Justicia Humana sería tan Justa como la Justicia Divina y se cumpliría a la perfección el principio de correspondencia del Kybalión: “ como es Arriba, es Abajo; como es Abajo, es Arriba”

He dicho.

Mario Lopez
31-01-2013 e.·.v.·.

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